Días conmemorativos

John Winston Lennon

El día 9 nació un gran músico. Gran día el de hoy, amigo.

Volvemos

 Tras el periodo vacacional que espero haya sido agradable para todos, intentaré retomar la abandona actividad de publicar algún que otro escrito. Aunque ahora tendré menos tiempo, así que no estará tan al día.

Vuelve todo el mundo al trabajo, los estudiantes a la escuela, y los políticos a la tele,a la radio y a los paneles electorales. Ya hablaremos.

 Saludos a todos los lectores.

Richard Starkey

 Felicidades, señor Ringo, por los 67 años que lleva usted vividos.

Amadeus

Hace aproximadamente cinco meses (el 27 de enero) Mozart habría celebrado su cumpleaños. El gran Mozart. El genio austriaco de la música, formidable e irrebatible. Amadeus fue y será el grande entre los grandes, un músico especial y magistral que muy difícilmente sería olvidado. 

 

Es cierto que gracias a él la avidez de nuestros ambiciosos canales auditivos ha podido ser saciada, pues nos ha brindado las más bellas obras que en la música han existido. Pero, aún admitiendo esto, no fue precisamente un músico ejemplar. 

 

El egocentrismo, e incluso se podría decir, el histerismo que crecía sin cesar en su pequeña (aunque privilegiada) cabecita lo dominaba casi por completo. Sus obras, opinaba él, eran perfectas, afirmaba que era evidente la ausencia de fallos con lo cual le parecía estúpida e inadmisible (a la vez que injusta) cualquier crítica negativa acerca de ellas. Esa arrogancia que lo caracterizaba en lo referente a las piezas que componía no era (ni es, en la actualidad) propia de un músico, es más, lo convertía en cierta medida en una persona repelente (todo esto apartando su confusa vida sentimental, pues se le está tratando como músico). 

 Con lo dicho es sencillo concluir que nuestro queridísimo, idolatrado y genial Wolfgang Amadeus fue un compositor excepcional cuya música (en la que ha quedado incrustada una leve dosis de su excéntrica locura) nos seguirá deleitando con complacencia siempre que lo deseemos. Además, si cavilásemos y escuchásemos con el suficiente interés cada una de las notas que ordenó de una forma críptica y deliberada la mente del insólito susodicho, sería posible apreciar los pensamientos que abordaban al mágico Mozart en el momento en que entintaba su pluma para disponerse a trazar sobre desnudas partituras cada una de las notas que le proporcionarían impetuosamente tanto el éxito como los problemas que atravesaría de un modo quizás confuso.

30 aniversario de la democracia española

Como lo oyen. Hasta hace treinta años no existía tal cosa en España. No había lugar alguno para eso que hoy llamamos libertad de expresión. Qué lejano suena, y, sin embargo, sólo hace treinta años. Y todo este cambio se lo debemos a la muerte de Franco, por supuesto, y a la iniciativa del gran Adolfo (Adolfo Suárez, claro está) que tiene la desgracia de padecer alzheimer en la actualidad. Fue un político ejemplar, uno de los poquísimos políticos (y el que más) que se han atrevido a apoyar sentida y concienzudamente el progreso para España, sí señor.

Recordemos lo que bien dijo: "Aquel político que no crea en convertir las utopías en realidades, no es un político, es simplemente, un traficante de ideas".

Murió la dictadura con el Generalísimo y nació la democracia con Suárez.

Lo único que cabe decir para finalizar es: Gracias

Bakunin

Disculpa los 2 días de retraso. Feliz 193 cumpleaños, Bakunin.